En Agosto me compré una orquídea.
Y creo que estamos viviendo procesos análogos, paralelos.
Primero se le cayeron las flores.
Segundo se le fueron cayendo las hojas.
Tercero el tallito empezó a ponerse amarillo.
Vino nuestra amiga a hacerle Reiki.
Mandé fotos a la señora que me la vendió en Iguazú:
"Cortale el tallo bien abajo, dale fertilizante y mucho aire".
Así estamos.
Sin hojas. Sin flores.
Tallo cortito.
Parece que hubiesemos muerto.
Estamos resucitando.
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